Hard candy de David Slade (2005)
Es de las pocas veces (sino es que la única) que veo que los encargados de traducir los títulos al español acertaron, y es que no podía ser de otra manera: Niña mala (que no Niñas mal, no confundir). Rescata elocuentemente la escencia de la película. Por la naturaleza de la misma me limito a no hablar mucho de ella pues cualquier dato podría arruinarle el final a quien quisiera verla.